La Unión de Artesanos de Santiago, mutualidad de previsión social, celebra hoy su 92 aniversario. Un cumpleaños agridulce ya que, según nos explica su presidente, Joaquín Quiñoy, «el Sergas nos está asfixiando económicamente, pasándonos facturas de servicios que nosotros no cubrimos (como tratamientos de UCI, entre otros). El año pasado pagamos 174.000 euros, que tenemos recurridos ante los tribunales, y este año tenemos recurridos y pendientes de pago 120.000 euros. Si nos obligan a pagar por servicios que no cubrimos, vamos a tener que cerrar y nuestros casi 6.000 mutualistas y los 35.000 actos médicos que realizamos al año (pruebas, consultas, etc) redundarán en el Sergas, con el consiguiente colapso de la sanidad pública. Nosotros siempre hemos pagado por los servicios que prestamos, por eso confío en que el problema con el Sergas se solucione, ya que les ahorramos entre 6 y 8 millones de euros al año».
Toda esta situación desanima al presidente y a una junta directiva que, tras la delicada situación que la mutualidad vivió en 2016, en el año que llevan al frente de Unión de Artesanos han conseguido sanear la entidad, «ahorrando solo en gastos de administración más de 60.000 euros», mejorar sus prestaciones y aumentar el ámbito de actuación a toda Galicía.
El presidente de Unión de Artesanos afirma que la mutualidad «tiene un prestigio entre los compostelanos que no se ha quebrado, son 92 años de existencia que no se pueden tirar por la borda. Por eso el año pasado decidimos dar un paso adelante y, sin cobrar ni un duro de sueldo (aún cuando la junta directiva está autorizada a percibir 42.000 euros al año) o dietas, ayudar a sanear y a modernizar la entidad».
Fuente: El Correo Gallego